Primavera y deseo sexual

Al adentramos en la primavera, y como suele ir unido a ello, las temperaturas han sufrido un notable ascenso y con el cambio horario, las horas de luz han aumentado también en nuestros dí­as.

Como también sabemos, la primavera va muy relacionada con el aumento de deseo sexual, tanto en hombres como en mujeres. En los hombres las hormonas responsables son los andrógenos; en las mujeres, los estrógenos. La exposición a la luz aumenta en ambos sexos la secreción de endorfinas, hormonas que rebajan el estrés, levantan en ánimo, vuelven a uno más receptivo y por ende, estimulan la respuesta sexual.

La estación previa al verano desata el onanismo, la masturbación y relaciones sexuales. Esto va acompañado también a que hay más tiempo libre, a la ropa ligera... La luz, el calor, tienen la culpa.

Según José Ramón Landarroitajáuregi, presidente de la Asociación Estatal de Profesionales de la Sexología y director del Centro de Atención a la Pareja Biko Arloak, "La luz es la encargada de estimular la hipófisis, la torre de control de las hormonas sexuales que está localizada en el cerebro; en los tiempos de más luminosidad hay una mayor actividad de la hipófisis y, por tanto, se liberan una serie de hormonas que juegan un papel clave en el deseo sexual y el enamoramiento".

En estas fechas, las clónicas de terapia sexual tienen su mayor actividad. Por un lado, reciben las llamadas de jóvenes que buscan asesoramiento contraceptivo, y por otro, parejas que ven descompensada su revitalización sexual y que no se cumplen sus expectativas.

Paralelamente, también coincide que la primavera es la época del año en la que más enfermedades de transmisión sexual se suceden entre los jóvenes. Esto lleva a reactivar las campañas en pro del uso del preservativo y la lucha contra el SIDA y otras ETS.

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